Ef. 6:1-3

Introducción: ¿A quiénes están dirigidas las palabras?: Alos hijos. No se refiere únicamente a aquellos que son niños o jóvenes, y que todavía están bajo la autoridad de sus padres. Se refiere a todos aquellos que tienen a sus padres con vida.

O.T.  ¿Cuáles son los consejos que da San Pablo?

1. Obedecerle

a. Generalmente, lo que las madres demandan de sus hijos, es justo.

b. Un amigo, un conocido, un compañero de trabajo, puede que nos

pida algo para sacar cierta ventaja personal: una madre, nunca.

c. Uno puede confiar que lo que la madre le dice, siempre es con el fin

de hacerle bien a uno.

2. Respetarle

a. Si uno le levanta la voz a su madre y le grita, no la está respetando.

b. Si uno no asume responsabilidades con el trabajo de la casa, no está

respetando a su madre.

c. Muchas veces la madre es vista y tratada como:

- cocinera, sirvienta, lavandera y planchadora.

d. Pero no como la mujer que le dio a uno la vida.

3. Dándole a entender que uno está orgulloso de ser su hijo.

a. Cuando los hijos se educan o prosperan económicamente, tienen la

tendencia de avergonzarse de sus madres.

- Porque es pobre, porque no tiene educación, porque no es muy

bonita, porque es anciana, porque está enferma.

4. Siendo atentos.

a. Son las pequeñas atenciones diarias las que hacen a una persona feliz,

y no los regalos que recibe una  o dos veces al año.

- Viéndola como sirvienta a la cual le traen un regalo el día de la

madre y navidad.

5. Siendo confidentes con ella.

a. A toda madre le agrada que sus hijos le cuenten sus problemas. Esto

no es curiosidad, es preocupación de madre.

b. No hay persona en el mundo como la madre que detecte al

momento cuando uno trae un problema.

CONCLUSIÓN: Para concluir, ¿qué tan cuidadosos somos para obedecer y honrar a nuestras madres? ¿Qué tan atentos somos con ellas? ¿Cuándo fue la última vez que les llevamos algo para expresarles nuestro amor?